Dicho cambio de metodología fue recomendado por el Defensor del Pueblo de la Nación a través de su Resolución 147/10. La clasificación de los pesticidas es una incumbencia nacional, y la metodología utilizada actualmente los hace clasificar como mucho menos tóxicos de lo que en realidad son, induciendo su manipulación y aplicación de una forma y una magnitud que provoca serios riesgos y daños a la población afectada.

Desde hace más de seis meses se viene solicitando al Ministro que la clasificación toxicológica de los agroquímicos  considere el conjunto de todos los daños a la salud que por su toxicidad pueden generar estos productos, y no sólo la toxicidad letal aguda, como ocurre en la actualidad, así como que los que no tengan demostrado el grado de su toxicidad subletal y crónica sean clasificados como “sumamente peligrosos, muy tóxicos”; e identificados con banda roja.

Se solicita también que los estudios sobre los que se basan las clasificaciones de los agroquímicos sean realizados por entidades que tengan reconocida independencia de criterio, es decir, que no estén o no hayan estado vinculados a las empresas y laboratorios que patentan, elaboran o comercializan los agroquímicos.

Como se expresa en la nota elevada al Ministro, su falta de respuesta “…muestra claramente la falta de vocación política de ese Ministerio en general y del SENASA en particular por cuidar la salud de la población de los daños que producen los pesticidas, muchas veces aplicados hasta el otro lado de las calles donde la gente desarrolla su vida, del otro lado de las medianeras de las casas donde viven las familias o del otro lado de los cercos perimetrales de las escuelas.”

Tampoco el Ministerio respondió a ninguno de los otros pedidos de informes solicitados, ni siquiera al pedido del listado de los laboratorios registrados para realizar los estudios toxicológicos de los pesticidas.  Parece ser que para el Ministerio se trata de información clasificada.

Por todo ello, en el día de hoy se inicia una huelga de  hambre con presencia efectiva en la entrada del Ministerio, sita en Av. Paseo Colón 982 de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.

Como la vez anterior, resaltamos que la noticia no es la huelga de hambre sino los millones de personas afectadas por las fumigaciones, la inacción del Ministerio de Agricultura, Ganadería y Pesca de la Nación en proteger su salud y su vida, y la falta de respuesta del Ministro a una petición que podría brindarles mayor protección y seguridad.

Por ello, transmitimos a los medios y a la población en general algunas de las muchas personas afectadas para que puedan comunicarse directamente con ellas, un listado de contactos que pueden relatar los daños que los pesticidas están generando a la salud, a la sociedad y al ambiente, y algunos teléfonos para contactarse con el Ministerio de Agricultura, Ganadería y Pesca de la Nación.

Fuente: Renace