La marcha se llevó a cabo el día lunes 9 de agosto, desde las 19.30, en el Club Social de Pérez hasta el Concejo de esa ciudad con la participación de unos 150 manifestantes entre vecinos afectados, población en general y militantes de agrupaciones ecologistas locales y de Rosario.

Dicha movilización se realizó en el marco de otro capítulo de un antiguo diferendo que sostienen contra la empresa Séptima Región S.A, concesionaria del denominado basural Rapetta —en referencia al titular de la citada empresa Rubén Rapetta—, ubicado al noroeste de Pérez y atravesado por el arroyo Ludueña.

Los afectados reclaman no sólo por los olores nauseabundos que provienen del basural sino por el alto grado de contaminación del suelo y de las aguas del arroyo Ludueña “las que, ya contaminadas se dirigen hacia Rosario”, recordó Federico.

De acuerdo a las quejas de los vecinos, “en los últimos meses, los olores en el basural fueron más fuertes que en otras ocasiones involucrando a zonas más amplias de la localidad, a tal punto de provocar malestar y náuseas en las personas que viven en sus inmediaciones.
Mabel Terré, otra pobladora afectada, recordó que los habitantes de Pérez sufren el humo y los olores provenientes del basural desde 1997. “Tanto el intendente como los concejales de la ciudad conocen la situación porque en diferentes oportunidades les solicitamos audiencias para que solucionen la problemática de los residuos y sus consecuencias. Sin embargo, aún no se recibieron respuestas que reparen la situación”.

Privado. El basural recibe principalmente residuos de empresas privadas y sólo está autorizado para admitir desechos compatibles con los de tipo domiciliario, pero según los vecinos en varias ocasiones han registrado el ingreso de basura no calificado en esa categoría. Además “los camiones ingresan en horarios irregulares y no cumplen con un recorrido que evite las zonas pobladas”, señalan.
“Nos hemos reunido con el secretario de Medio Ambiente de la provincia, (César) Mackler la semana pasada, concejales, diputados. y se nos dijo que el basural está habilitado sólo para desechos cloacales de Pérez, no obstante lo cual el lugar está lleno de basura”.

Intimidante. Hernán Federico indicó, respecto de Rapetta, que “cada vez que fuimos al Concejo nos encontramos con escribanos públicos enviados por él o con cartas documento enviadas a todos los vecinos que se movilizaron para protestar; doctores, ingenieros abogados; todos las recibieron por el simple hecho de pedir información que, a priori, es pública. También envió cartas al Concejo pidiendo que se graben las sesiones en las que se tratan estos temas, intimidando a los vecinos”.

Sin control. No obstante lo prolongado del conflicto, los vecinos indicaron a La Capital su deseo que “si ese basural tiene que funcionar, que lo haga correctamente. No hay estudios de impacto ambiental ni fiscalización alguna del municipio”.
El otro problema denunciado en reiteradas oportunidades por vecinos de Pérez y el Taller Ecologista de Rosario es la quema de residuos en ese basural, a la que se sumarían los efluentes líquidos que se estarían arrojando, sin un tratamiento correspondiente, al arroyo Ludueña.

Fuente: La Capital