El estudio, que comenzó a mediados de este año, pretende caracterizar este rubro comercial para dilucidar no sólo cómo son los productos que allí se ofrecen, sino además la posibilidad de estos espacios para fortalecer o generar una vinculación directa con productores de alimentos. Y así también la predisposición a adoptar acciones pedagógicas y divulgativas en torno a los alimentos y a la alimentación.
Construir soberanía alimentaria en una ciudad de la magnitud y escala de Rosario, implica acortar las cadenas de comercialización, consumir alimentos producidos a corta distancia y con prácticas agroecológicas, concientizar sobre otro tipo de consumo de alimentos. En ese sentido, diversas estrategias se llevan adelante por distintas organizaciones de la sociedad civil y el municipio. Entre ellas están las Ferias de verduras del Programa de Agricultura Urbana, la Feria de Caramelos Sueltos, Mercado Solidario, Comercio Solidario, el Camión de Economía Popular del Movimiento Evita, los puntos de venta del dulce de leche “La Resistencia” de Giros, entre otros.
Multiplicar estas experiencias aumentaría la posibilidad para que la ciudadanía pueda acceder a un alimento sano, seguro y soberano.