Los concejales del Frente para la Victoria, Norma López y Roberto Sukerman, presentaron un proyecto para que la Municipalidad local informe sobre las medidas adoptadas para impedir el daño ecológico que causa la explotación comercial de los terrenos de las islas ubicadas frente a Rosario.

“Estos terrenos fueron donados a la Municipalidad, por lo tanto es la que tiene que intervenir porque, según diversas denuncias, están ocupadas ilegalmente por personas que han realizado terraplenes y puentes que obstruyen el normal escurrimiento del agua, afectando seriamente el equilibrio ecológico de los humedales", señalan los ediles kirchneristas en un comunicado emitido ayer.

"El terraplenado realizado en forma ilegal causa, por un lado, el anegamiento de terrenos y, por el otro lado, el secamiento de los mismos, preparándolos para la práctica de la agricultura y la ganadería”, afirmó Sukerman, en base a los estudios que llevaron adelante grupos ecologista en  en los terrenos de la Isla Charigüé.

“En el año 2005, la municipalidad de Rosario, hizo un llamado a licitación privada para el relevamiento planialtimétrico y mensuras de terrenos de su propiedad ubicados en la isla Charigüé pero, se desconoce si ese proceso licitatorio fue llevado a cabo, si se adjudicó la obra y su consiguiente ejecución. También queremos saber cuál es la situación jurídica de los mismos, y las medidas adoptadas en caso de estar los mismos ocupados en forma ilegal”, insistió el jefe de bloque del Frente para la Victoria.

“Se han constatado caminos terraplenados, cuya traza atraviesa cauces naturales, todos obstruidos en su libre escurrimiento, causando un notable enducamiento de las aguas fluviales y consecuente inundación de los campos lindantes. Es decir, no solo se estaría modificando y destruyendo el ambiente en los lotes del Municipio sino que se estaría afectando seriamente toda la zona”, añadió López, quien se desempeña como vicepresidenta del Concejo Municipal de Rosario.

“La situación es muy grave. La Municipalidad no está custodiando esos terrenos que son de su propiedad y, por lo tanto, propiedad de todos los ciudadanos rosarinos. Esta ausencia del estado y omisión permite además que un privado, lo arruine, modifique, explote y encima, contribuya a la destrucción ecológica de las islas del Charigüé”, finalizó Sukerman.

Fuente: La Capital