El viernes 21 de diciembre, el Movimiento de Trabajadores Excluidos (MTE) y Federación Argentina de Cartoneros, Carreros y Recicladores (FACCyR), con el acompañamiento de Grupo Obispo Angelelli y Taller Ecologista, se concentraron frente a la Secretaría de Ambiente y Espacio Público para reclamar por la situación del sector y por políticas públicas efectivas que incluyan a lxs cartonerxs como parte de los sistemas públicos de recuperación y reciclado. 

El 2018 se termina y para los cartoneros y cartoneras de la ciudad como un año difícil, con más personas recorriendo las calles de la ciudad, en un contexto de aumento de la pobreza y con limitadas políticas públicas que atiendan adecuadamente la situación. El desarrollo de una experiencia de separación en origen con inclusión de cartoneros, proyecto aprobado por el Concejo a fines de 2017, y que representa una oportunidad para diseñar políticas públicas innovadoras e inclusivas, tuvo escasos avances en el año por la nula prioridad que le dio el Ejecutivo Municipal.

Las organizaciones Movimiento de Trabajadores Excluidos (MTE) y Federación Argentina de Cartoneros, Carreros y Recicladores (FACCyR), con el acompañamiento de Grupo Obispo Angelelli y Taller Ecologista, se concentraron este viernes 21 por la mañana frente a la Secretaría Municipal de Ambiente y Espacio Público para reclamar por la situación del sector y por políticas públicas efectivas que incluyan a lxs cartonerxs como parte de los sistemas públicos de recuperación y reciclado.

Lxs cartonerxs son un eslabón imprescindible de una cadena industrial de reciclaje. El Relevamiento Nacional de Barrios Populares, realizado durante los últimos dos años por las organizaciones sociales de la ciudad, y que abarcó los 112 barrios populares, mostró que en éstos alrededor de 3000 personas trabajan como cartoneros. Asimismo las organizaciones reportan, desde su experiencia cotidiana, un notorio incremento en el número de personas que recorren las calles.

Al contexto económico general, se suma el agravamiento provocado por la decisión del Municipio, a comienzos del 2017 de poner fin al uso de caballos, sin haber generado ninguna alternativa eficaz para los cartoneros afectados. Según los referentes de las organizaciones, esto produjo una desarticulación de parte de la economía asociada a la recuperación de materiales que les permitía generar más ingresos y obtener otros recursos. Muchos de ellos, ante la falta de opciones, continuaron recorriendo las calles de la ciudad, arrastrando ellos mismos sus carros, perjudicando su salud en esta modalidad que, sin duda, debe llamarse de tracción a sangre humana.

Significativamente durante el 2017 la ciudad envió a disposición final en Ricardone una cantidad récord de residuos, un 5% más que en 2016.

Frente a esta difícil situación, lxs cartonerxs están apostando a la organización colectiva y crecen iniciativas de solidaridad mutua. Algunas cooperativas de cartoneros instalaron comedores y parte de lo obtenido con los materiales recolectados se destina a su funcionamiento. Asimismo se están reforzando convenios con comercios para buscar materiales reciclables, y se han generado experiencias autogestivas de recolección diferenciada.

Experiencia piloto, sin avances

A fines de 2017 el Concejo Municipal aprobó el decreto 51.224, que encomienda al Ejecutivo el desarrollo de una experiencia de separación en origen incluyendo a los y las cartoneras como actores principales del sistema. Este proyecto fue impulsado por las organizaciones con el objetivo de poner en marcha alternativas reales e inclusivas para el sector.

El decreto, aprobado el 30 de noviembre de 2017, dispone que, en un plazo no mayor a los 120 días de su aprobación, el Ejecutivo debía convocar a las organizaciones a una mesa conjunta para consensuar y delinear los principales aspectos de la experiencia a desarrollar. En el año transcurrido no hubo avances concretos. Sin embargo los fondos disponibles (alrededor de 4 millones de pesos para el año 2018) no han sido dispuestos para esta experiencia.

Las organizaciones demandan mayor prioridad de este tema en la agenda del Ejecutivo para poner en marcha a la brevedad la experiencia. Y reclaman políticas públicas efectivas que incluyan a lxs cartonerxs como parte de los sistemas públicos de reciclado.